SUEÑA EN GRANDE...!!!!!
Publicadas por Gisela Gonzalez Friz - Cmdte. Mayor , 29-03-2010 9:02 p. m.
Todo el mundo tiene un sueño en su corazón. No me refiero a querer ganar la lotería. Ese tipo de idea viene del deseo de escapar de nuestras circunstancias presentes, y no del deseo por buscar un sueño del corazón.
Hablo de algo mucho más profundo, de aquella visión interior que habla al alma misma. Es nuestra asignación en la vida, es aquello para lo que hemos nacido. Demanda nuestros dones y talentos. Invoca a nuestros más elevados ideales. Ilumina nuestro sentido de destino. Cuando hablo de soñar, hablo de eso.
Un sueño hace muchas cosas a nuestro favor:
Dirección
Todos necesitamos apuntar en alguna dirección. El sueño nos da eso. Es una especie de brújula, y nos dice en qué dirección debemos viajar. Y mientras no hayamos identificado esa dirección correcta, nunca sabremos si estamos progresando.
Desarrolla nuestro potencial
Cuando soñamos, comenzamos a vernos bajo una nueva luz, como beneficiarios de un nuevo potencial y no solo con los talentos sino que además capaces de avanzar y crecer hasta alcanzarlo. Toda oportunidad que encontramos, cada recurso que descubrimos, cada talento que desarrollamos llega a formar parte de nuestro potencial para crecer en dirección hacia ese sueño. Mientras mas grande el sueño, mayor el potencial.
Agrega valor a nuestro trabajo
Un sueño pone en perspectiva todo lo que hacemos. Aun las tareas que no son interesantes ni tienen una recompensa inmediata cobran valor cuando sabemos que a larga contribuirán a la realización del sueño. Cada actividad se convierte en una pieza importante de un cuadro más grande. Me hace recordar la historia de un periodista que hablaba de tres obreros de la construcción que ponían concreto en un lugar.
—¿Qué estás haciendo?—preguntó al primer trabajador.
—Me estoy ganando un cheque—gruñó. Le hizo la misma pregunta al segundo obrero, quien lo miró por encima del hombro y le dijo: «¿Qué le parece que estoy haciendo? Estoy mezclando concreto».
El tercer trabajador sonreía y silbaba mientras trabajaba.
—¿Qué haces?—le preguntó. Dejó lo que estaba haciendo y con entusiasmo dijo: «Estoy haciendo un hogar para los desamparados». Se limpió las manos y continuó: «Mire, allí estará la cocina. Allá el dormitorio de las mujeres. Allá…»
Los tres estaban haciendo el mismo trabajo. Pero solo el tercero estaba motivado por una visión mayor. El trabajo que hacía cumplía un sueño, y agregaba valor a sus esfuerzos.
Predice nuestro futuro
Una visión profetiza lo que puede ser nuestro. Es una invitación a hacer algo. Con un gran cuadro en la mente vamos de un logro a otro usando los materiales que nos rodean como peldaños hacia lo que es más alto, mejor y más satisfactorio. Así llegamos a ser poseedores de valores invisibles que son eternos, es decir nuestro sueño, cuando lo seguimos, es el mejor pronosticador de nuestro futuro.
¡Tú puedes empezar a seguir tu sueño hoy mismo!